¿Cuáles son los plásticos de un solo uso y por qué sustituirlos?
Los plásticos de un solo uso son aquellos diseñados para que se utilicen una sola vez y luego sean desechados. Los más comunes son los recipientes utilizados para empacar o envasar alimentos preparados en el sitio, para llevar o consumir -incluidos los productos fabricados en poliestireno expandido (icopor)- que tienen una corta vida, tales como: platos y bandejas, vasos y botellas, cuchillos, tenedores y cucharas, pitillos y mezcladores, bolsas y empaques de comida para llevar.
¿Por qué deberían ser sustituidos estos plásticos? Según la ONU, para 2025, habrá en el mundo suficiente plástico para cubrir cada metro de costa con 100 bolsas, y para 2050 habrá más plástico que peces en los océanos.
Veamos otras cifras globales y nacionales que permiten dimensionar el panorama:

Reducir los plásticos de un solo uso, tendencia nacional
Desde el Gobierno Nacional, específicamente desde el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, se han generado iniciativas con el fin de lograr que, a 2030, el 100 % de los plásticos que circulen en el mercado sean reutilizables, reciclables o compostables.
El primer paso para lograr esa meta será conseguir que, a 2023, los empresarios hayan avanzado en la sustitución de plásticos en las etapas de producción, distribución y comercialización. A 2025, se espera que el 25 % de los productos sean fabricados con materiales sostenibles y reciclados, para conseguir que los desechos plásticos sean usados como insumos por otras industrias.
Paralelamente, el Gobierno ha avanzado en medidas como prohibir el ingreso de plásticos de un solo uso al sistema de Parques Nacionales Naturales de Colombia y desarrollar 27 proyectos piloto colectivos de gestión de envases y empaques. Estos están enmarcados en la reglamentación de la gestión ambiental de residuos de envases y empaques de papel, cartón, plástico, vidrio y metal.
Amparados en la normativa nacional, varios departamentos y municipios de Colombia ya tomaron la delantera y empezaron a fomentar la reducción de plásticos de un solo uso en sus territorios. Este es el caso de San Andrés, Boyacá, Guatapé, y Urrao, entre otros.
Bogotá se compromete con la reducción de plásticos de un solo uso
A nivel regional, la Alcaldía de Bogotá es una de las que está tomando el liderazgo sobre el tema. Bajo la premisa de que el ejemplo comienza por casa, expidió el Decreto 317 de agosto de 2021, que establece medidas para reducir progresivamente la adquisición y consumo de plásticos de un solo uso en entidades y entes de control del Distrito, alcaldías locales y Concejo de Bogotá.
El objetivo es que la transición se haga de forma gradual para no generar impactos económicos negativos en el sector y atender la demanda de plásticos al tiempo que se trabaja en el desarrollo de alternativas sostenibles, la reducción de residuos dañinos para el medio ambiente y una mejora de las condiciones ambientales actuales.
Lo anterior implica retos tanto para las entidades como para las empresas que participan en las compras públicas. En el primer caso, deben considerar que todos los eventos que organicen, sean públicos o privados, sigan las directrices sobre el uso de plásticos. Además, deben incluir en el Plan Institucional de Gestión Ambiental (PIGA) su meta de reducción anual.
Por otro lado, los terceros o compañías que deseen participar en las compras públicas están llamados a repensar sus modelos de negocio, pues también deben ceñirse a criterios de sostenibilidad, sobre todo si se tiene en cuenta que la meta es que a 2028 todas las entidades incluidas en el decreto tendrán que haber reducido el 100 % de plásticos de un solo uso.
Se exceptúan de la norma los plásticos usados en la prestación de servicios médicos y carcelarios, la contención de sustancias químicas que representan riesgos para la salud humana y la ejecución del Plan de Alimentación Escolar (PAE) del Distrito.
Purabox: desechables ciento por ciento biodegradables
“Es más costoso limpiar el medio ambiente que usar empaques biodegradables. Por eso, la idea es que el mayor porcentaje lo sean y que únicamente se use plástico por motivos de bioseguridad o cuando ofrece beneficios de desempeño; por ejemplo, al empacar ciertos artículos, pues ofrece barreras de protección que otros materiales no”.
María Claudia Gómez, gerente de Purabox.
La inquietud que siempre tuvo por los temas ambientales condujo a la ingeniera industrial María Claudia Gómez a crear Pura Imagen, una empresa especializada en la impresión digital en gran formato en materiales biodegradables con tintas amigables con el medio ambiente, una novedad frente al uso excesivo de plástico que se suele emplear en eventos comerciales y ferias.
“Mi papá, que es ingeniero químico, me explicaba que es muy difícil reciclar este plástico porque existen tantas mezclas posibles de materiales para generarlo que tendría que haber el mismo número de procesos químicos para transformarlo y, entonces, resultaría más costoso ese proceso que la misma producción”, recuerda la empresaria.
Sus preocupaciones ambientalistas también la llevaron a vender cubiertos que no fueran de plástico. “Un día vi una cucharita de madera y me propuse promover su uso”, cuenta. Hizo la investigación de mercado e importó el primer contenedor de cubiertos y mezcladores de madera en 2016. Su primer cliente fue Juan Valdez y, en adelante, comenzaron a llegar más. Unos querían migrar a otros materiales porque lo decía la ley, otros porque sabían que era lo correcto, otros porque esa era la estrategia corporativa de sostenibilidad, y otros porque les nacía. Así nació Purabox, una marca de Pura Imagen que hoy es líder en el segmento de desechables biodegradables.
“Esta categoría es grande y su sustitución implica combinar todas las formas de lucha. A los cubiertos siguieron los vasos, tazones, contenedores, pitillos, bolsas, protectores de calor, cajas de pizza y portavasos. Es difícil tenerlo todo, pero buscamos ser integrales frente a clientes comerciales que quieren migrar a esquemas biodegradables”, afirma Gómez.
Uno de ellos es Selva Nevada SAS, empresa de alimentos naturales que, desde su creación en 2007, usa ingredientes naturales que buscan agregar valor a los productos forestales no maderables, creando así un incentivo de protección de los bosques, y evita el consumo de plásticos u otros residuos sólidos o líquidos que puedan afectar el medio ambiente: “Por razones de inocuidad no hemos podido reducir el plástico en un 100 %, pero tenemos aliados como Purabox para sustituir el plástico por el cartón. En la actualidad, el 53 % de los cubiertos o recipientes que usa la empresa son biodegradables”, afirma Catalina Álvarez, gerente administrativa.
Agradecimientos especiales al Grupo Bancolombia por resaltar la importancia de uso adecuado de residuos y la urgente descontaminación de nuestro Planeta. Adiós a los plásticos de un solo uso en Colombia